El Regionalismo Granadino

De Granada Wiki
Ir a la navegación Ir a la búsqueda

nota.... seguir artículo d Juan

Seguir notas de web historia reg and Oriental


Antecedentes[editar | editar código]

Difícilmente encontraremos alguna referencia al Regionalismo Granadino en los libros de texto. Mas bien ha de buscarse la información ya sea por publicaciones literarias de reconocidos historiadores, o bien recurrir a la hemeroteca que internet nos ofrece.

El objetivo de este apartado es detallar los principales hitos históricos del Regionalismo Granadino y las personas que lo hicieron posible.


En 1898, remontándonos a sus orígenes, el regionalismo granadino es un pensamiento perfectamente organizado, desde finales del XIX a los albores del siglo XX, y entre cuyos padres encontramos a Francisco Seco de Lucena que, decía en un discurso memorable:

“la idea regionalista bien entendida y aplicada, puede contribuir al engrandecimiento de las entidades territoriales que forman la patria, y por consiguiente al engrandecimiento de la patria misma, en Granada como en ningún otro país puede dar frutos de próspera bienandanza el despertar del espíritu regionalista; porque difícilmente podrá encontrarse un territorio que tenga los rasgos de su personalidad tan enérgicamente marcados, como este conjunto de las cuatro provincias que formaron el Reino de Granada en tiempo de los moros (…) El regionalismo no es político. Su forma práctica es la descentralización administrativa, compatible con todas las formas de gobierno.”

En 1918, Con el transcurso de los años, el sentimiento regionalista impregnó en la Región de Granada de manera que se trasladó al ámbito de lo político, de forma notable. Como muestra, el ministro de Fomento, Francesc Cambó (político conservador, catalanista y fundador de la Liga Regionalista) proclamaba en diversas conferencias en Granada:

el movimiento regionalista se inicia vigorosamente y cuenta con valiosas adhesiones que le harán luchar con muchas garantías de éxito por la circunscripción y otro distrito de la provincia; en Málaga, Almería y Jaén”.

Sin embargo, se expresó en tonos pesimistas respecto de Sevilla

“que era la capital andaluza más obligada a batallar por su resurgimiento y el de la región y sigue una inercia desesperante”.

Publicado en el Diario de Córdoba en su edición de 22 de Febrero 1918