Atalaya del Cautor, La Mamola
La Atalaya del Cautor o de Cautor es una torre vigía, de la costa del Reino de Granada II y III, que también tuvo uso defensivo temporalmente gracias a alguna pieza de artillería con que fue dotada. Su función primitiva era la vigilancia y después también defensa contra los piratas norteafricanos y turcos que asolaban las costas buscando botín y cautivos o esclavos.
Localización[editar | editar código]
Está situada en la cúspide de un escarpado monte de unos 80 m de altura sobre la localidad de La Mamola, municipio de Polopos, La Alpujarra, Provincia de Granada, Región Histórica de Granada, España.
Historia
Reino de Granada II o Nazarí
Durante este periodo hubo en este lugar una construcción militar, como demuestran los restos encontrados, especialmente de cerámica nazarí, cuya función era la de avisar a la cercana alquería de Cautor, de ahí el nombre de la torre.
Reino de Granada III o Cristiano Una nueva torre fue construida en el siglo XVI sobre restos de la anterior. Su función era de vigilancia y comunicación, ya que avisaba de los peligros llegados por mar y retransmitía las señales de otras torres. A fines de este mismo siglo tuvo que ser reconstruida por estar ruinosa. Pasado un tiempo fue dotada de artillería ligera, incluso a finales del siglo XVIII proyectaron añadirle una batería al pie, similar a la que tuvo la Torre del Zambullón, pero no llegó a construirse por su poca eficacia debido a la gran altura del emplazamiento. La torre estuvo atendida por tres torreros y tres soldados de infantería.
Periodo de la Región de Granada Con el paso del tiempo la atalaya dejo de ser necesaria ya que el peligro marítimo desapareció, terminando abandonada. Recientemente se le ha realizado alguna restauración que ha evitado su ruina y se ha construido un acceso peatonal.
Descripción Es una torre casi cilíndrica y terraza plana, protegida por un parapeto, desde la que se hacían y retransmitían las señales con fuego o humo según fuese día o noche.
Su fábrica es de mampostería de piedras irregulares unidas con argamasa de cal viva y arena, fue revestida con un enlucido de cal y arena del que quedan algunos restos.
La parte inferior está reforzada con un revellín defensivo y otros restos, tal vez de aljibe. El acceso era una puerta-ventana orientada hacia el este situada a bastante altura para mayor seguridad, el aceso se realizaba con una escala de cuerda que se recogía cuando no era usada. La puerta estaba protegida más arriba por un buzón matafuegos saliente del que sólo se conservan los matacanes que lo sustentaban.
Interior Sus dos tercios inferiores son macizos como es muy habitual en este tipo de construcciones. En el tercio superior hay una sala cubierta por bóveda de media naranja construida con ladrillos macizos. Su interior tiene chimenea, escalera a la terraza embutida en el muro y ventana orientada al mar. La corona una terraza con parapeto desde la que se hacían señales de humo por el día y hogueras en la noche para avisar del peligro de llegada de enemigos.
Tiene en la costa, hacia el oeste, la batería de dos cañones del Castillo de Baños a poco más de km y medio, y hacia el este la atalaya de Melicena a casi cinco km.
La noria
En el pie de la torre atalaya, ya a la altura de la rambla existen los restos de una antigua noria que merecen conservarse por ser patrimonio histórico e hídrico.